LAS PREGUNTAS CORRECTAS: ¿QUIÉN SOY? ¿QUIÉN SERÉ?

 

Hay una pregunta recurrente que nos hacemos con cierta intranquilidad de vez en vez todo padre o madre cuando miramos a nuestros hijos con mirada reflexiva: ¿Qué será de ellos cuando sean grandes?

Esta pregunta por si sola nos llena en ocasiones de miedos y dudas por la incertidumbre propia del FUTURO. Ante esta pregunta, si dejamos fuera de la ecuación el azar, y nos enfocamos en lo que está en nuestras manos, y lo pensamos bien, el futuro se forja a su vez de muchos PRESENTES.

Es decir, lo que haga o deje de hacer hoy, impactará en mi futuro, o en el de mis hijos, entonces tal vez una pregunta adecuada para resolver parte de la pregunta futura sería: ¿Qué son, o quienes son mis hijos hoy?

Para Aristóteles en su libro Metafísica (libro quinto Cap.VIII-XII, ya les he platicado que fui maestro universitario de filosofía y ética durante años para ayudarme con los gastos de la casa), él nos podría decir que actualmente nuestros hijos son Sustancia, Acto y a la vez Potencia. Lo ejemplificaré de la manera más fácil que pueda.

Imagine que sostiene usted una semilla de roble en su mano. ¿Qué es lo que mantiene entre sus dedos? ¿Una semilla, o un árbol, o ambas cosas?  La semilla en SUSTANCIA (lo que determina su esencia) es un elemento vivo del reino vegetal, que al ACTO (actualmente) es semilla, pero que dentro de ella tiene la POTENCIA para convertirse en un gran árbol de roble.

Por supuesto que la semilla no es árbol todavía, pero puede llegar a serlo, incluso grande y hermoso, si se les siembra en buena tierra, se le riega con agua suficiente, se le abona, se le cuida de depredadores etc. Así sucede con nuestros hijos, ellos son seres humanos, actualmente unos niños, y van a llegar a ser hermosos y grandes hombres y mujeres de bien, de raíces fuertes y sombra abundante para todas nuestras familias, si nos esmeramos en educarles y fortalecerlos física, espiritual e intelectualmente desde hoy.

Ahora te pregunto mientras miras la semilla en tu mano. ¿Quién eres tú hoy para esa semilla? Y ¿Quién serás para ella en el futuro?

Luis G. Escobar

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